¿Por qué más personas desarrollan cálculos renales en el verano?
Normalmente vemos un aumento de pacientes con cálculos renales aproximadamente seis semanas después de un pico de calor. El clima muy caluroso tiende a desencadenar la deshidratación, que puede convertirse en una bola de nieve y formar piedras. Las personas no beben suficiente agua y se deshidratan, lo que aumenta las posibilidades de que se formen cristales.
Como ocurre con muchos problemas de salud, la genética también puede influir. La dieta de uno a menudo también contribuye a esta aflicción. Una dieta rica en sodio y proteínas, que incluye comer mucha carne animal, provoca con mayor frecuencia la aparición de algunos tipos de cálculos. Querrá limitar la cantidad de alimentos altamente procesados y alimentos de restaurante que consume, ya que son fuentes importantes de sal y sodio.
El intestino también puede ser el culpable. Si tiene un microbioma menos favorable, uno que es menos diverso y está lleno de bacterias malas, es más probable que desarrolle cálculos renales. Los investigadores todavía están tratando de determinar qué tipos de bacterias en nuestros intestinos pueden ayudar a reducir el riesgo de cálculos.
El tipo de cálculo más común está hecho de oxalato de calcio. Los urólogos pueden analizar la composición de los cálculos para comprender los factores que ayudan a determinar el riesgo de que se produzcan más cálculos. Se recomienda beber más agua a cualquier persona que haya tenido un cálculo renal, independientemente del tipo de cálculo. Para muchos, los cambios en la dieta pueden ayudar a reducir aún más el riesgo de cálculos futuros.